A soñar con monstruitos...

¿Habéis visto la cunita monstruosa de El Telar de la Gata que hemos comprado para los gordis con la excusa de que en marzo Noa y Elmo cumplen años? Como digo, esa solo es la excusa porque lo cierto es que llevaba tiempo siguiendo la labor solidaria de este miauravilloso taller con el que quería colaborar y solo hizo falta que tuvieran en stock una cuna en tela de monstruitos (que me encanta) para que terminara de decidirme. Y, como podéis ver en las fotos, el resto es historia 😸

El reparto tras el unboxing: Wi se queda el papel y Elmo, la cama.

Un monstruo, dos monstruos, tres monstruos...

Cuando compras cualquier cama para ellos lo que más puede llegar a chincharte es que no le hagan ni caso (y creedme si os digo que esas cosas pasan) Pero en esta ocasión el éxito ha sido rotundo y nuestra cunita telarera suave, mullida y calentita no ha defraudado ni a humanos ni a gatos. ¿El proceso de compra? Sencillo: contactamos con la hacendosa Ángeles, elegimos la cuna que nos gustaba (la de telita de monstruos para nuestros tres monstruos), sumamos a su proyecto y en pocos días recibimos el paquete. Y ya cuando lo abrimos en casa, ¡locura total! Porque la cuna es preciosa y además venía acompañada de un juguete relleno de valeriana la mar de apestoso pero que a ellos les encantó 😸 Si a esto le añadimos que se trata de un producto solidario con el que hemos ayudado a algún gatete necesitado, la experiencia ha resultado 100% satisfactoria.

¿Qué inventos son estos? Noa atraída por la novedad.

Hablando de camas, ¿de verdad los gatos necesitan una?

Imaginad que sois primerizos y que acabáis de acoger/adoptar a un gato. ¿Os habéis parado a pensar qué menaje es indispensable para su día a día? Porque vuestro recién llegado necesita disponer de un lote básico de enseres que, grosso modo, podríamos resumir en:

• Cacharros para comer y beber.
• Bandeja para la arena
• Un rascador de buen tamaño.
• Una manta.
• Algún juguete.
• Un transportín.

Viendo esta lista tan mínima seguro que alguien está pensando ¿y ya está? ¿Dónde está la cama? Pues quizá os sorprenda pero una camita no es para nada indispensable para un gato porque ellos eligen el sitio donde les gusta dormir y lo harán en tu silla del ordenador, en tu sofá, en tu almohada, en una caja, en tu armario o en alguna de tus maletas aunque lo sé: es inevitable que al final terminemos por ofrecerles una cama propia. ¡Los humanos somos así! No concebimos el mundo sin este mueble destinado al descanso y, puesto que vamos a hacerlo, ¿qué tal si elegimos una especial que ayude a ayudar? Por eso lo mejor es no precipitarse y tomarnos un tiempo para que la cama ideal (sea con forma de colchoneta, de cuna o de saquito) nos encuentre a nosotros. Y si estáis en ese punto de encontrar la cama purrrfecta, ¿qué tal si optáis por una cunita telarera?

Cuidando la imagen de los cat-model durante la sesión.

El proyecto telarero.

Las cunitas de El Telar de la Gata son simplemente estupendas: hechas a mano con telas suaves de diseños alegres que transmiten de todo lo bueno, lo mejor: calor de ese bonito que cobija cuerpo y corazón arropándolo con mucho, muchísimo amor y no solo para el gato que duerme en ella sino para todos aquellos gatetes que se benefician con nuestra compra. Porque creo que ya lo he dicho pero lo repito: todas las compras telareras son SOLIDARIAS. Y no solo tienen cunas, ¿eh? Que también tienen mantas, saquitos y, para humanos, bolsitos y neceseres. Todo muy gatuno. Todo muy catlover. Todo made con love. Todo para ayudar a ayudar.

Elmo disfrutando de su preciosa cunita y listo para soñar con monstruitos. ¿Le acompañáis?

¿Que cómo surgió todo esto? Ángeles, la humana encantadora que regenta el telar, nos contó que es cofundadora de la Plataforma Ciudadana proAnimales de Oviedo (Asturias) y durante mucho tiempo su labor voluntaria se desarrolló directamente en las calles, al menos hasta que sus circunstancias personales cambiaron. Fue entonces cuando, lejos de dejar de ayudar, decidió cambiar la 1ª línea de combate animalero por aguja e hilo y el resultado es este taller que a través de sus ventas a toda España consigue dinero para sufragar gastos y facturas de la Plataforma y que, de vez en cuando, tiene el detallazo de colaborar con casos puntuales de otras asociaciones y causas.

¿Que cómo podéis conseguir vuestros productos telareros? Pues fácil: por encargo personalizado o adquiriendo stock en venta. Muy importante esto del stock, ¿vale?, porque son cositas ya confeccionadas que están listas para ser enviadas: lo recibiréis antes que un encargo y daréis salida a camas y mantas ya hechas. ¡Oxígeno para el proyecto! Nosotros compramos stock, no os digo más.

Para ver qué telas y estampados hay disponibles, lo mejor es seguir El Telar de la Gata Facebook  y El Telar de la Gata Instagram. Para ver qué causas están apoyando, lo mejor seguir sus redes. Para ver a qué gatetes están ayudando, sus redes. ¿Pero cómo? ¿Que seguís aquí? ¿A qué estáis esperando para visitar sus redes?

Y, hablando de redes: ¿habéis leído ya nuestra aventura congatera vía Facebook Elmo y el Wi-sante?