Entre gatos

- ¡Ohhh! Buenas noches, muchacha: te estaba buscando. ¿Se puede saber desde cuándo estás ahí sentada?
- La verdad... No sé decirte...
- Imagino por experiencia que solo estás de paso.
- ¿De paso?
- Sí, es lo que soléis hacer: pasar aquí un rato y una vez repuestos seguir vuestro camino. Aunque ahora seguramente te sentirás rara, confusa, ¿sí? Tranquila, eso pasará. Pero mientras te recuperas y te decides a continuar, ¿te parece si me enrosco a tu lado y te hago compañía?
- Sería estupendo.
- En tal caso, me presento: me llamo Tiger. ¿Y tú?
- ¿Eileen?
- Es un nombre precioso, Eileen. ¿Te apetece rascarme? 

Tiger se acerca tranquilo pero decidido a Eileen y se ovilla a su lado. Ha hecho esto tantas veces que ya ha aprendido que es mejor ir despacito porque la rapidez puede desbaratarlo todo. Pero hoy la cosa va bien y ella ya ha empezado a acariciarle.

- ¿A qué huele, Tiger?
- Bueno, es una mezcla peculiar de plantas y productos químicos. Pronto te acostumbrarás.
- ¿Por qué será que contigo a mi lado me siento segura?
- Es normal. Considérame tu guía especial, el guía de tu alma.

De repente la chica deja de rascarle, levanta la vista y escudriña su alrededor. Muebles sobrios. Cristales de colores. Cortinas de terciopelo. Música clásica (¿quizá Chopin?) Eco de lágrimas. Y ese olor peculiar. Y tras comprender, mira al gato directamente a los ojos en busca de respuestas.

- ¿Estoy muerta, Tiger?
- Tu cuerpo, sí. Fue rápido, un accidente. Pero ya se han encargado de arreglarlo para la ceremonia de mañana.
- ¿Y entonces yo...?
- Tú eres lo que los humanos llaman espíritu.
- Un... ¿fantasma?
- No es que sea mi palabra favorita porque conduce a pensar en sábanas y cadenas pero si así lo entiendes mejor, ¡equilicuá! 
- ¿Y qué debo hacer ahora?
- Seguir adelante en cuanto la luz venga a ti.
- ¿Y mi familia?
- Ellos encontrarán consuelo en tu recuerdo y sanarán pero para eso tú debes avanzar.

De repente un hombre con traje gris irrumpe en la sala portando arreglos de flores que va depositando sobre las mesas y Eileen se da cuenta de que son sus favoritas. ¡Cuánto amor dedicado a ella transmite la fragancia de las fresias! Y embriagada por el perfume de una vida más bien corta pero intensa acepta lo inevitable y lo siente todo mientras asiente, que Tiger tiene razón y lo mejor es seguir adelante.

- ¿Te parece si te quedas a mi lado hasta que esté lista para irme?
- A tu lado estaré, Eileen. Y tranquila, ¿eh? Tenemos todo el tiempo del mundo. Prrrrrrr... 

congatos gato en adopcion gatera oscar congatosloloco
Óscar, un gato mayor, negro y con alergia atópica. En adopción con la protectora La Gatera (Adopt a Cat) de Madrid.

Música. Flores. Una puesta de sol a través de vidrieras de colores. Cojines de terciopelo. Y un gato etéreo y espectral ronroneando en la funeraria que quizá fue su hogar o en la que simplemente se coló por casualidad junto al alma de una chica recién fallecida que espera su momento para avanzar. No sé si este cuento tendrá tan buena acogida como espero porque todo lo que está relacionado con la muerte suele provocarnos urticaria, dolor y rechazo pero siendo algo que tarde o temprano nos alcanzará a todos tampoco sirve de nada esconderse así que ¿nos permitís en esta ocasión rozar el tema sigilosos, de puntillas y con respeto a través de esta exaltación romántica en versión actualizada del poder psicopompo de los gatos? Y de verdad que esperamos que os guste a pesar de tratarse de un relato entre fantasmas porque lo aprovechamos para presentar al bueno de Óscar, un gato de 10 años (¿o ya son 11?) que, acogido por la protectora La Gatera (AdoptACat) de Madrid, parece haberse convertido en invisible y necesita tanta difusión como sea posible: madurito, de color negro, alérgico y acompañado por un gato y una chica fantasma. Mmmm... No pinta bien pero al menos hay que intentarlo y como poco lograrlo así que ¿alguien especial que tras pasear por nuestra funeraria se anime a enamorarse de un gato tan especial?

Aviso para GATOnautas: Para obtener más información sobre Óscar, contactad directamente con la protectora. ¡Ronroneos!

Texto original publicado en Facebook @congatosloloco (03/04/2018)

Comentarios